El resultado de las muestras analíticas tomadas 15 días después de realizar el tratamiento contra la legionella en el circuito de agua caliente sanitaria del CEIP Víctor Mendoza ha sido negativo, por lo que se ha restablecido la total normalidad en el uso de la misma. Asimismo, se han adoptado algunas medidas preventivas para evitar, en lo posible, la repetición de la infección detectada en este centro escolar, como la colocación de la mezcladora de agua lo más cerca posible del punto de consumo, favoreciendo la desinfección térmica del circuito, en las duchas del gimnasio o la instalación de un termo eléctrico acumulador de 30 litros de capacidad, anulando el existente, lo más cerca posible del punto de consumo, compuesto por un grifo de limpieza y una ducha termostática de consumo directo sin circuito de retorno. Igualmente, se han incrementado a dos al año las tomas de muestras para aumentar la seguridad en las instalaciones. «Es decir, se han aplicado todos los medios humanos y materiales lo más rápido posible para solucionar el problema», resume el concejal de Educación, Juan Carlos García.
Cabe señalar que tampoco se ha producido ningún caso personal de infección por esta bacteria a causa de este episodio.