28.09.2018
El alcalde de Lérida, Félix Larrosa, y el presidente de la Diputación Provincial de Huesca (DPH), Miguel Gracia, hicieron un llamamiento para que la política y todas las instituciones pongan en práctica el entendimiento que manifiestan los vecinos de la zona Oriental de las provincias de Huesca y Lérida. La declaración de intenciones la enmarcaron en un encuentro en el que participaron una treintena de representantes municipales, coincidiendo con la feria de San Miguel y su fiel reflejo de las buenas relaciones de vecindad y en términos de actividad económica existentes entre las comunidades aragonesa y catalana.
Ante la actual situación política y social que se está viviendo en Cataluña y resto de España con el llamado “proceso catalán”, los alcaldes de diferentes municipios limítrofes de Aragón con Cataluña y el alcalde de Lérida se reunían en la capital del Segriá con la intención de reforzar el entendimiento y buenas relaciones, a todos los niveles, entre estos pueblos a un lado y otro del límite de comunidades. La intención manifestada es la de poner en marcha un foro con la sociedad civil de las dos comunidades, donde periódicamente se debatan y divulguen todas las cuestiones que afecten a las relaciones cotidianas de ambos lados de la frontera. “A partir de hoy vamos a dar un paso más activando mecanismos que piensen en las personas y en un mayor dinamismo económico de estas zonas”, subrayaba Félix Larrosa. Por su parte, Miguel Gracia apelaba a trasladar a la política y a todas las instituciones el modelo de entendimiento que ponen en práctica a diario los habitantes de esta zona oriental: “Nuestros antepasados se han relacionado, se han casado, han comerciado, han compartido servicios, han ido a la escuela, a la universidad, a los hospitales, y han ido a trabajar al otro lado con normalidad, han hablado lo mismo desde hace mil años y jamás dejaron que creciera una frontera de división entre los pueblos. Hoy, seguimos compartiendo estos servicios y seguimos manteniendo relaciones comerciales y proyectos conjuntos de desarrollo en estos territorios, por eso debemos empeñarnos en que no crezca una frontera de división entre nosotros». El grueso de alcaldes reunidos en Lérida manifestaban que “el enfrentamiento no le va bien a la gente que vive en estas zonas y tampoco a la actividad económica”. Frente a los grandes titulares que se generan desde Barcelona, Madrid o Zaragoza lamentan que “solo se destacan las discrepancias” y, sin embargo, ellos entienden el término “frontera como territorios de convivencia”. A juicio de los participantes en esta reunión, procedentes de comarcas como La Litera, Bajo Cinca o Ribagorza, “es más lo que nos une que lo que nos separa, cada uno sabemos que somos aragoneses, que son catalanes, pero esa proximidad hace que nuestra cultura sea prácticamente la misma”.
Por el momento, no hay plazos ni fechas para la próxima reunión, aunque sí se ha previsto designar a dos coordinadores de cada lado para que empiecen a organizar el foro, según indicaba el presidente DPH.